MONTESA BRÍO 81

En 1954 Montesa era una industria firmemente asentada, con una cuota de mercado importante y unas ventas que la colocaban a la cabeza de la producción nacional. Hasta la fecha sus modelos destacaban por potencia y fiabilidad, situándose entre las más rápidas del catálogo nacional. Pero a medida que la economía española se recuperaba, un tipo creciente de clientela buscaba en la moto más economía y menos sensaciones. Respondiendo a este grupo de clientes Montesa lanzó una nueva gama de modelos Brío, inaugurada con la Brío 80. Muy similar al modelo deportivo ? Brío 90 ? la 80 montaba ruedas de menor sección, menor potencia y una entrega de ésta más racional. Como consecuencia, la 80 era más una moto de turismo y de día a día que la 90. La gama Brío 80 tuvo un éxito inmediato, prolongando su existencia a través de los años siguientes, con las modificaciones que dieron lugar a los modelos 80/54 y 80/56. En 1956 la deportiva Brío 90 fue sustituida por la Brío 91, una moto que rápidamente destacó en competición. Una vez logrados los objetivos publicitarios con el modelo de altas prestaciones, llegó el momento de dar paso a la sustituta de la ?moto tranquila?, naciendo así la Brío 81, a comienzos de 1957, una moto que aprovechaba todos los avances aplicados en el modelo 91, pero de nuevo con una entrega de potencia más racional y suave, de modo que podía circular en cuarta velocidad desde los 20 hasta los 80 km/h, recuperando con facilidad. La Brío 81 se produjo entre 1957 y 1959, fecha en la que fue sustituida por la Brío 82. Entre otras razones destacó por sus acabados, en verde metalizado, que rompían claramente con la costumbre de la casa de terminar sus motos en su rojo característico. Por este motivo fue conocida entre los aficionados como ?La Trucha?. Al final de sus dos años de existencia, la Brío 81 se alzó como el más rotundo de los éxitos comerciales de la firma, con unas ventas que alcanzaron las 18.544 unidades.